El lifting facial, también llamado ritidectomía, consiste en elevar y tensar la piel corregir el descolgamiento, actuando sobre la piel del cuello, barbilla, mejillas, contorno de ojos y sobre el tejido muscular, para obtener un resultado más duradero. Se consigue con ello que el paciente muestre un aspecto mucho más joven y un rostro terso y libre de arrugas. Las arrugas finas, producidas en su mayor parte por la exposición al sol no desparecen con el lifting y debe tratarse por otros métodos (láser, peelig, etc.)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario